7 trucos para adiestrar a tu perro

¿Es un ladrador, mal educado y desobediente? ¿Pone al límite tu paciencia y tolerancia? ¡Adiestrar a tu perro sí es posible!

Solo necesitas compromiso y constancia. No siempre todo es “miel sobre hojuelas”, pero, como en toda relación, los límites y la “comunicación” son básicos. Además, recuerda que somos los responsables de cualquier desperfecto que pueda causar nuestro querido peludo.

Aquí te presentamos unos consejos para que disfrutes completamente la compañía de tu fiel amigo, sin peligros ni sobresaltos.

Adiestrar a tu perro: ¡un reto superado!

Con paciencia, disciplina y cariño, podrás entrenar a tu perro sin importar su raza o tamaño, pues se fortalecerá tu vínculo con él y harás que se comporte adecuadamente.

1. Socialización

La socialización permite al perro relacionarse con otros animales, con todo tipo de personas como niños, ancianos o adultos. Además, ayuda a adaptarse correctamente en diferentes ambientes (ciudad, campo, playa, etc).

Las interacciones deben ser siempre positivas, pues el perro debe sentirse alegre cada vez que conoce a una persona, sin miedos y voluntariamente.

  • Cuando tus amigos o familiares te visiten, pídeles que interactúen un momento con tu cachorro. Le pueden ofrecer algo de comer, una caricia o jugar con él.
  • Pasea a tu perro para que vea a gente y cosas nuevas todos los días.
  • Acostúmbralo a la presencia de niños, bebes y otros perros, acercándolo y ofreciéndole algo que le guste.
  • Habitúalo a las manipulaciones: cárgalo, acarícialo, revisa sus dientes, sus patitas, siempre con cuidado y gentilmente.

2. Controlar el ladrido

El ladrido es su forma de comunicarse y conocer los motivos que lo provocan te ayudará a controlarlos. Puede ser por estrés, soledad excesiva, ansiedad por la separación, socialización inadecuada, frustración, genética, territorialidad o miedos.

Muchas veces los ladridos se solucionan rodeando al perro de bienestar, un derecho que por naturaleza le corresponde.

  • Asegúrate de que tenga suficiente comida, bebida y espacio para descansar. Fomenta su relajación y tranquilidad con caricias, masajes o premios.
  • Cánsalo, juega con él, sal a pasear, haz que corra.
  • Ármate de paciencia, pues tiene que disfrutar de experiencias nuevas poco a poco.

3. Hacer sus necesidades en un lugar designado

Primero: recuerda que es a partir de los 4 meses que el perro controlará eficazmente sus esfínteres. Antes de esa edad, los accidentes serán comunes.

  • Establece un área y cúbrela con periódico, papel especial o pasto sintético. Llévalo ahí cuando camine nervioso, olfatee el piso o de círculos.
  • Limpia completamente cualquier otro lugar que haya ensuciado, pues los olores lo incitan a volverlo a hacer ahí.
  • Saca a pasear al perro cada 2 o tres horas y, cuando haga sus cosas, prémialo. Una caricia suele ser suficiente.
  • Evita gritarle o pegarle, solo le provocarás miedo.

4. Perro y bebé

La llegada de “otro” bebé a casa puede causarte dudas sobre el comportamiento del peludín, pero solo necesitas amor y paciencia para que funcione la nueva familia.

  • Nunca dejes sin supervisión al bebé y a tu perro juntos. Generalmente, no son agresivos con un niño, pero hay que extremar las precauciones.
  • Recuerda seguir premiando sus buenas conductas y refuerza ahora las relacionadas con el bebé.
  • Pide ayuda a tus amigos y familiares para que compartan tiempo con el perro y dedícale palabras y caricias a pesar de tu ajetreada vida.

5. Evita que se jale de la correa

Salir a pasear debe ser un placer para ambos, pero, en ocasiones, se vuelve una lucha de fuerza.

  • Consigue un arnés cómodo y adecuado. En caso de mucho jaloneo, la mejor opción es el arnés anti-tiro, te sorprenderá gratamente.
  • La mayoría de las veces tira por la excitación salir: hazlo con regularidad y permítele olisquear y orinar los 10 primeros minutos. Luego es más fácil que camine junto a ti.
  • Escoge una palabra como “junto” para hacerle saber que permanezca a tu lado. Recompénsalo cuando lo haga y no tirones con fuerza.

6. Viajes en carro con mascotas educadas

Es muy útil que tu perro se acostumbre a viajar en coche desde pequeño, pero, si ya es mayor la regla se aplica igual: de menos a más.

  • Procura habituarlo con viajes cortos y que representen diversión.
  • Amárralo bien o usa su jaula de viaje con algún juguete. Si está acompañado por alguien, lo puede acariciar cada tanto.
  • Ofrece agua cada hora y la posibilidad de estirar sus patitas.
  • Consulta con su veterinario la opción de proporcionarle algún medicamento contra el mareo. Regularmente se duermen y eso hace el viaje más tranquilo.

7. Conoce los seguros de responsabilidad civil

Aunque no sea obligatorio, contratar un seguro de responsabilidad civil es muy aconsejable. Todos los perros pueden ser mascotas educadas, pero los accidentes ocurren y no solo nos referimos a ataques:

  • Jugando, puede tirar a otra persona.
  • Si se escapa y corre podría causar un accidente de tráfico.

Un perro educado y una póliza de seguro te protegen de cualquier imprevisto y te dan la tranquilidad de disfrutar la vida con tu peludo amigo. ¡Conócelas y corretea sin mayores preocupaciones!

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